¿Os acordáis de las muñecas recortables de papel? Yo podía pasarme tardes jugando con ellas. Recuerdo que tenía varias, cada una con su nombre, y que las guardaba como un tesoro en sobres de papel.
Hace tiempo descubrí por casualidad unas muñecas similares, pero esta vez hechas de fieltro, con un poco de volumen. Y las ropas en vez de ser de papel eran de tela. Pero es que además, tenían su propia casita en forma de bolso de tela. Vamos, una cucada.
Así que una vez más, me obsesioné con un proyecto y buscando patrones por Internet topé con el blog “La vida a lo ancho” de Covadonga Castañón. En una de sus entradas (“Mariquitas, muñecas recortables”) mostraba el bolso casita de tela que había hecho para su nieta. Una verdadera obra de arte. El bolso por dentro tenía una camita para la muñeca y una cómoda donde guardar todos sus vestiditos.
Total, que me puse manos a la obra y este es el resultado:
Como veis, la muñeca tiene un vestuario muy completo: pijamas, vestidos, bañadores, conjuntos de pantalón corto, faldas…
La muñeca está hecha con fieltro y tiene un poco de relleno de guata para darle algo de volumen. Para los vestidos, utilicé tela de pegar sobre tela normal. Y luego le añadí unas pequeñas tiras de velcro que se sujetan sin problemas a la muñeca de fieltro.
El bolso tiene un asa bastante grande, para colgar fácilmente del hombro. El interior del bolso casita simula ser un dormitorio, con su cama, un mini perchero (las perchas están hechas con clips) y una cómoda donde guardar todo el vestuario de la muñeca.
En casa tenemos una cocinita de juguete con un sinfín de complementos: cazuelas, sartenes, cubiertos, tazas, tacitas y tazones, mini cajas de cereales, todo tipo de comidas de plástico y hasta una tarta en porciones. Pero lo que más ha triunfado, sin duda, son las comiditas de fieltro.
Durante varias semanas me volví adicta y cada noche me ponía manos a la obra con fieltro, aguja e hilo.
Una de las creaciones de la que más orgullosa me siento es la mini hamburguesa completa, con su pan, lechuga, queso, tomate y carne.
¿Qué os parece?
Si te animas a hacer este proyecto, necesitas recopilar los siguientes materiales: hojas de fieltro de distintos colores (dos tonos de beis para los panes, verde para la lechuga, rojo para el tomate, marrón oscuro para la carne y amarillo para las lonchas de queso), relleno para los panes (guata), aguja, hilo y unas buenas tijeras.
Para que os resulte más fácil recortar el fieltro, he preparado una plantilla con la forma de los panes y el resto de los ingredientes. La plantilla está en formato pdf. Así que solo tienes que abrirla, guardarla en tu equipo o imprimirla directamente en la impresora en un folio normal.
Para hacer los panes hay que recortar dos trozos de fieltro de diferentes colores (más oscuro para la parte exterior y más clarito para la interior). Primero puedes dar unas puntadas sobre el trozo de fieltro que va a ir en la parte superior, para simular que son las semillas de sésamo del pan. Después, unes los dos fieltros de distintos colores, los coses y cuando apenas quede un centímetro para cerrar el círculo, lo rellenas con la guata y termines de cerrar.
El pan de la parte inferior de la hamburguesa se hace del mismo modo, pero con menos relleno.
El resto de los ingredientes son muy fáciles de hacer. No hay que usar ni guata ni hay que coser nada. Basta con recortar el fieltro con la plantilla de cada ingrediente.